La Asociación está gobernada por la Asamblea General, la Junta Directiva y el Presidente/a y a la misma pueden pertenecer todos los Polígonos y Parques Industriales Comerciales y Empresariales que desarrollen su actividad en la provincia.
Es ampliamente conocido que los Polígonos y Parques de nuestro ámbito territorial presentan numerosas carencias, especialmente en cuanto a las infraestructuras se refiere: accesos, aparcamientos, redes de saneamiento y tecnológicas…, pero también la seguridad, la limpieza o las zonas verdes son otras tantas demandas que no son atendidas en la medida que requiere la importancia del número de empresas y de trabajadores establecidos en estos Polígonos y Parques y su contribución al Producto Interior Bruto (PIB) provincial.
Uno de los objetivos que nos marcamos en APOMA es el de la información, en un doble sentido: conocer con exactitud cuál es la realidad de nuestro suelo industrial y comercial, proporcionando datos útiles a nuestros asociados y proyectar más allá esta información para atraer inversiones a estas zonas y motivar a las Administraciones Públicas a su mejora mediante las fórmulas que en cada momento más convengan.
Málaga está a la cabeza de Andalucía en creación de empresas y generación de riqueza y empleo y los Polígonos y Parques concentran una gran parte de este espíritu empresarial. Es una realidad que Málaga necesita más suelo industrial, si éste es escaso será caro y no resultará atractivo para la radicación de empresas, de ahí que se ralenticen las potencialidades que ofrece el territorio y de ahí también que se precise más apoyo institucional a estas concentraciones tan emprendedoras del tejido productivo y de servicios de la provincia de Málaga.
La recepción por parte de los Ayuntamientos, de los Polígonos y Parques -a los que sin apenas contrapartidas se les exigen cuantiosos tributos-, es otra de las exigencias de APOMA, que reconoce, no obstante, el paso dado con el nombramiento de un Concejal para atender esta realidad en la capital. Pero a este paso deben seguir otros, como dotaciones presupuestarias suficientes para intervenir en las zonas de referencia.
En APOMA nos parece, asimismo, inexcusable la coordinación de todas las Administraciones Públicas en aras de las actuaciones que se reclaman. Para nadie es un secreto que las diferencias entre Administraciones de distinto color político, retrasan y encarecen, cuando no impiden, la entrada en funcionamiento de servicios o la ejecución de infraestructuras. El bien general debe anteponerse siempre a la legítima controversia política, y el rigor y la profesionalidad servir de guía en la gestión de los intereses públicos.
Pues bien, a todo este cúmulo de problemas, alternativas, interlocutores, coyunturas económicas, situaciones jurídicas, abandonos e ilusiones quiere dar respuesta APOMA desde el convencimiento de que el progreso económico y social de nuestra provincia depende muy mucho de la unidad empresarial en los Polígonos y Parques y de la relación de éstos con su entorno.
